jueves, 22 de abril de 2010

Seguro estás en la misma que yo.

Desde hace algunos días, vengo con un mal humor que no me soporto más.

Es cierto que la discusión política no le interesa a todos. Entiendo que a la mayoría, o por lo menos, a gran parte de la gente, le aburre estar viendo todo el tiempo informes, entrevistas, textos, videos, y demás, relacionados con temas sociales.

Pese a eso, parece que hoy en día, no aburre recibir y difundir mensajes “Anti K”. Son constantes los mails que recibo, los artículos que suben, por ejemplo en Facebook, personas conocidas, que nunca se preocuparon por la política.

Durante mucho tiempo me aguanté que, sumada a la campaña de desprestigio hacia nuestros gobernantes que se viene llevando a cabo en los principales medios de comunicación, haya una “ciber-campaña”, donde las personas dejan de pensar y difundir sus pensamientos, para convertirse en simples reproductores de una idea ajena.

Pero después de recibir y ver montones de mails, cantidades de “powerpoints”, imágenes, etc., los cuales ya caen en lo repetitivo, aparentemente sin que se den cuenta quienes los reenvían, me harté.

Me pregunté a mi mismo, ¿qué pasa si a estos tipos que reenvían tanta cosa negativa, les mandás algo con otra visión?

¿Se puede lograr un cambio de opinión en los demás con mails?

Como se imaginarán, la respuesta que encontré es NO.

Pero, así como mis mails y publicaciones en Facebook pasaron inadvertidas para la mayoría, supongo que no fueron las cadenas anteriormente mencionadas las que hicieron que hoy esas personas opinen como lo hacen.

Como dijo Carlos Escudé (reconocido antikirchnerista) en TN, “Ser antikirchnerista se ha convertido en un activo snob”. Eso es lo que se logró a través de la durísima campaña mediática en contra de los Kirchner y sus aliados. Fíjense hasta qué punto han llegado, que hoy por hoy, para ser una “persona bien”, una “persona con calle”, para ser “parte del pueblo”, hay que estar en contra de todo lo que haga el Gobierno.

Así como en la escuela me enseñaron que todo argentino debe querer a San Martín, en estos últimos años aprendí que todo argentino debe odiar a los Kirchner.

Si bien soy una persona que no se deja arrastrar por la corriente, llegó un punto en el que dije “Martín, ponete a buscar toda la información que puedas, porque no puede ser que todo el mundo se equivoque”. Claro, todavía no estaba entrenado para leer entre líneas los comentarios “objetivos” que se hacen a través de los medios.

A partir de ese momento (esto fue desde el conflicto con el mal llamado “campo”), cada vez que hay algún movimiento en el tablero de la política, me tomo el trabajo de escuchar detenidamente a quienes defienden dicho movimiento, y sabiendo que luego de eso viene la catarata de críticas, empiezo a filtrar los argumentos.

Gracias a esa “técnica”, logré pensar por mí mismo, y no ser pensado por “la opinión pública”.

Durante los últimos meses, se me hizo costumbre publicar en mi perfil de Facebook videos, comentarios y artículos de diarios expresando mi apoyo hacia ciertas medidas del Gobierno de Cristina Fernández. ¡¿Para qué?! Cada vez que publico algo, a los dos minutos ya tengo tres o cuatro críticas.

Ahora, lo que hago es simple. Cuando alguien me escribe una crítica, le respondo: “Si me vas a criticar, incluí argumentos. Si no hay argumentos, ni me caliento en contestar.”, a lo que añado, “Decir ‘son chorros’, ‘nos están arruinando’, y ese tipo de comentario no es un argumento; simplemente, estás repitiendo lo que ves y escuchás en otro lado, y no me decís por qué pensas eso.”.

Me han llegado a preguntar “¿A vos te pagan para poner tanta cosa oficialista?”. No, y no aceptaría plata por ello. Si aceptara dinero, pese a que opinaría lo mismo que ahora, me sentiría desautorizado para hablar.

Si les interesa saber cuál es la reacción frente a mi petición, les digo… No responden más.

Es cierto que se pueden criticar muchas cosas de este Gobierno, pero son temas que el común de la gente ni siquiera conoce. Tan solo los militantes y alguna persona que realmente se interesa en el tema sabe cuáles son los grandes errores de la actual gestión. El resto, se limita a ubicarse en ese lugar de opositor, que tan cómodo es.


Seguramente me voy a quedar con mil cosas para decir sobre el tema, pero por lo menos, logré un pequeño desahogo de tanta pálida.

¡Gracias por leerme!

Un abrazo,

Martín.

2 comentarios:

  1. martin, ahora sabemos que junto con lagente bien pensante derecha y humana seguidora de mirta legrand y de majul tambien hay periodistas pagos en una operacion de inteligencia. Mira el blog de Lucas Carrasco y difundi la noticia.

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  2. Martin, mandà links de videos de 678. Son mucho más efectivos.
    Lo del activo snob lo dijo Escudé

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